Llegó el momento de probar uno de los vinos de los que más y mejor he oído hablar últimamente.
Comerciales de la competencia cantando sus excelencias no es poca cosa, aunque escuchar a determinados vendedores de humo ensalzando sus virtudes daba que pensar.
(Confieso que alguna fotografía, de determinado "directivo" de la bodega, en "tirantitos" posando en plena vendimia no me predisponía al desembolso de los 15 euros que vale la botella. Prejuicios, lo sé, pero a veces no fallan)
Así que para despejar incógnitas, lo mejor era catarlo para confirmar o refutar mis dudas.
Antes de hablar del resultado, cuatro pinceladas sobre el origen y "el como" de este vino:
El coupage, según la fuente que se consulte va del, 60% Garnacha Peluda + 40% Merlot, al 70% Garnacha Peluda + 30% Merlot, pasando por otras combinaciones que incluyen un 1% de Cabernet Sauvignon + 1% de Syrah.
En la web se quedaron en la añada 2005, el equipo humano, muy majos todos (los Domenech, digo, de Toni Coca no hay foto), está formado por mucho directivo de ventas y supongo que ninguno está para esas cosas de actualizar la web, deduzco que la viña se cuida sola, bueno suficiente, sigamos...
La crianza, según que fuentes se consulten, se sitúa entre los 14 y 15 meses en roble americano y francés (50-50), en cuanto a si son nuevas, de primer o segundo uso, hay todo tipo de variantes y combinaciones, así que lo pasaremos por alto.
El vino
Color rojo cereza, brillante, de capa media.En nariz se muestra muy mediterráneo, con buena intensidad, fruta madura, roja y negra, con notas de romero muy aparentes.
Como acompañamiento van surgiendo notas sutiles de mineralidad, pero el corpus de este vino es sin duda esa madurez ligada a notas muy claras de sotobosque mediterráneo.
En boca se muestra afrutado, sabroso, tacto suave y con una aparente cremosidad láctea que no se adivinaba en nariz, pero con la idea de frescura siempre presente.
Recomendable para todo aquel que busque un vino afrutado, sabroso, a la vez que fresco.